La investigación académica sobre la intersección de la salud mental y el derecho penal ha traído como consecuencia una nueva visión sobre el uso de las Ciencas Sociales. ¿En qué medida éstas ciencias promueven el bienestar psicológico y físico que consumen sustancias psicoactivas? En el estudio de la epidemiología del fenómeno social del consumo de drogas que se erige como un conflicto de salud, económico y social condicionado por las secuelas de la farmacodependencia, se identifica aún una política oficiosa de prohibición y represión que obstaculiza el desarrollo de una política preventiva eficaz. Sobre ello maerita cuestionarse, ¿cuál es el papel que tiene la ley como agente del cambio social -terapéutico- frente a algunos comportamientos de proclividad criminógena que detonan por el consumo de sustancias psicoactivas? Ambas interrogantes constituyen el objeto de estudio de la presente obra. En México, la justicia teapéutica constituye un mecanismo que permite contrarrestar el ascenso de las cifras inquietantes en el consumo de sustancias psicoactivas. De trata de una nueva aproximación al fenómeno criminal gracias a la instauración de tribunales de justicia para el tratamiento de las adicciones en México, que tienen como objetivo fundamental, la la rehabilitiación y reinserción social de los justiciables. Estos tribunales especializados, cuyo impulso provino desde una experiencia local exitosa en el año 2008, cuentan con programas integrales que constituyen una solución viable de tratamiento personalizado y un instrumento eficiente de prevención social del delito. La interacción entre la persona que cometió el delito, la autoridad judicial y el personal de salud, delimietan el preoceso de cambio desde el Derecho, la Medicina y la Criminología, que permea en los ajustes que deben hacerse sobre la justicia terapéutica en nuestro país. Por esa razón, la presente obra pretende a su vez alterar el desarrollo y la expansión de instituciones procesales como los citados tribunales para que funjan como mecanismo de auxilio a la solución de conflictos en la arena penal provocados por el consumo de sustancias psicoactivas. Así, nuestra evaluación de las lecciones aprendidas en la materia, invitan a capitalizar dicha experiencia para redoblar esfuerzos y perfeciconar la política pública en curso desde una visión interdisciplinaria.